
La cerámica vidriada (o cerámica vitrificada) lleva con nosotros miles de años, siendo el fruto de la cocción de barro arcilloso esmaltado (terracota esmaltada). Este esmalte suele tener una fuerte composición de barniz de plomo denominado frita (fritta) o marzacotto. Por tanto, el proceso alfarero de vidriado o vitrificación contribuye a proporcionarle a la cerámica una capa protectora que haga las piezas más resitentes, las impermeabiliza y, por supuesto, las dota de una mayor belleza superficial.
Como hacer cerámica vidriada
Si te estás preguntando como se hace la cerámica vidriada vamos a contarte brevemente los pasos que debes dar.
Lo primero que debes saber es que vidriar la cerámica (vitrificarla) consiste en, sencillamente, darle una capa de esmalte. Cada uno de ellos ofrece resultados distintos, por lo que te contamos a continuación los distintos tipos de esmaltes que hay:
Esmaltes transparentes
Como su propio nombre indica dejan pasar la luz y reflejan el color de la pieza con una capa de brillo. En ocasiones se utilizan colorantes u óxidos metálicos para darle toques de color.
Esmaltes opacos
Dan una tonalidad mate del color que sea el esmalte. El óxido de zirconio es el elemento más usado para lograr este efecto.
Esmaltes alcalinos
Son los ideales para lograr esmaltes de color blanco, utilizando como fundentes el potasio, sodio, litio, francio, cesio y rubidio.
Esmaltes plumbicos
Los esmaltes de plomo usan este material como fundente, siendo muy usados por su capacidad de combinarse con óxidos de colores. Sin embargo, debido a su toxicidad no pueden usarse en artículos culinarios.
Esmaltes bóricos
Este esmalte a base de boro (como fundente) es uno de los más usados por su bajo precio y la calidad de los resultados.
Esmaltes raku
Gracias al cual las piezas adquieren una tonalidad oscura y con efectos muy dispares, amparados en la tradición japonesa y en los hornos de raku, generalmente de leña.
Esmaltes cuarteados
Presentan un efecto cuarteado y agrietado superficialmente muy llamativo. El plomo es el elemento común, lo que ha impiden que puedan usarse para elementos que tengan que ver con la comida.
Vidriado feldespático
Son la mezcla de arcilla roja o blanca, feldespato y cenizas, logrando que las piezas alcancen un color generalmente oscuro con una textura muy particular.
Esmaltes salinos
El fundente en este caso es el cloruro sódico, la sal, el cual reacciona con la sílice de la arcilla en el horno caliente originando un acabado vítreo y rugoso.
Estilos e historia de la cerámica vitrificada
Fundamentalmente son dos las principales épocas donde la cerámcia vitrificada consiguió importantes avances:
Cerámica vidriada andalusi
También conocida como cerámica vidriada hispanoandalusí tuvo lugar entre los siglos viii y xv y aportó dos grandes avances a la cerámica:
- El cambio de formas haciendolas más estéticas
- El esmaltado y vidriado, propiamente dicho, que contribuyó con la mejora estética.
Cerámica vidriada romana
La cerámica vidriada romana fue muy extendida a lo largo del mundo debido al amplio espacio cronológico que ocupó (desde el siglo iv a.c. hasta el fin del imperio romano) así como por la amplitud del propio imperio romano. Se caracteriza por una gran diversidad en todos los sentidos, desde la variedad y los distintos tipos de piezas hasta un amplio espectro de colores, siendo el vidriado uno más de esas variaciones.